El 18 de diciembre lo tenía señalado en rojo en mi calendario pues pensaba acudir a las 19:00 horas a escuchar el concierto de Navidad que el Coro de la Biblioteca Nacional daba en la sede de la misma. Como la entrada era libre y no quería perderme la actuación de mi amigo Noto y del resto de componentes de la formación, a las 18:00 llegué a la Biblioteca. Mi pronta llegada no sirvió de nada, pues ya se habían repartido todas las localidades. Frustración, al tiempo que pena, por no poder escuchar a tan magnífica agrupación. ¿Qué hacer a esa hora de la tarde? Una posibilidad era la de visitar alguna de las exposiciones abiertas en la propia Biblioteca Nacional. Y así lo hice.
"Retrato y Literatura. Los retratos de los premios Cervantes de la Biblioteca Nacional de España"
El título de la exposición me atrajo, pues no es muy habitual la relación entre literatura y pintura. Me encontré con una galería de 39 retratos, uno por cada uno de los galardonados con el Premio Cervantes, que van desde el que Carlos García Alix hizo a Jorge Guillén (Premio Cervantes, 1976) a la última galardonada, Elena Poniatowska, cuyo retrrato -en esta ocasión fotográfico- es obra de Alan Flores Vargas.
La idea de crear esta galería de retratos que se guarda en BNE surgió el año 1999 siendo director de la institución el poeta Luis Alberto de Cuenca. Por una parte se buscaba que en la selección de artistas siempre existiese algún tipo de vinculación entre el pintor y el retratado o su obra; y, por otra, que la colección de retratos sirviera también para mostrar una cumplida panorámica de los diversos modos y maneras expresivas, técnicas y estilos que caracterizan el retrato contemporáneo. Ambos propósitos se consiguieron sobradamente y así se puede comprobar por parte del visitante. Respecto a la intención primera, además de la afinidad personal, estética o literaria, entre escritor y artista, en no pocos retratos se percibe bien a las claras que el pintor ha conseguido plasmar en el lienzo el mundo literario del protagonista; los retratos de Juan Carlos Onetti (Premio Cervantes, 1980), de Ernesto Sábato (Premio Cervantes, 1984) o de Jorge Luis Borges (Premio Cervantes, 1979) son claros ejemplos de esto.
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Aspecto de la Sala de Exposición |
Respecto a la diversidad en las técnicas y estilos pictóricos empleados y percibidos en los cuadros, el abanico de los mismos es amplio; así, por ejemplo, se utiliza la técnica del grabado en el magnífico retrato que Hernán Cortés Moreno le hace a José Manuel Caballero Bonald (Premio Cervantes, 2012), el puntillismo lo adivinamos en el que Carlos Benjamín Lira Valdés le hace a Mario Vargas Llosa (Premio Cervantes, 1994), la pura fotografía en el excelente autorretrato que Nicanor Parra (Premio Cervantes, 2011) ideó, la vanguardista técnica del 'cuadro invisible' que el artista Yishai Jusidman emplea en el retrato de Carlos Fuentes, etc., etc.
Decir por último que todos los retratos guardan una relación de uniformidad de tamaño y formato (130 x 100 cm), y todos ellos están enmarcados del mismo modo.
Materiales literarios del retratado
La exposición se completa con la muestra en unos expositores centrales de materiales literarios de los retratados: manuscritos, primeras ediciones, papeles personales, postales, cartas manuscritas, algunos de sus libros más representativos... Prácticamente, todo el material expuesto pertenece a la Biblioteca, excepto el de una serie de autores -Poniatowska, Torrente Ballester, Vargas Llosa, Gelman- cuyos manuscritos pertenecen a colecciones particulares.
Final
La exposición se completa con una serie de vídeos que pueden visionarse en la web de RTVE donde se ha creado un
micrositio que permite acceder a los discursos de aceptación de todos los premiados y a diversos programas de TVE y RNE con entrevistas, reportajes, etc relacionados con el Premio Cervantes.