Acabo de finalizar la lectura de "Camille" y mi admiración por Lemaitre ha vuelto a su nivel incial. No es que en algún momento dejase de admirar al novelista francés pero sí que, en mi opinión, según fui leyendo las cuatro novelas que componen su serie Verhoeven, tras el puntazo primero que para mí supuso "Irene" hubo una leve inflexión en "Alex" y "Rosy &John". Pues bien, "Camille" ha supuesto para mí un repunte magnífico que pugna por ser incluso mejor que la primera de la serie, o sea, vamos, increíble.
Y es que, claro, en "Camille", que supone el cierre -¿definitivo?- de las aventuras del comandante Camille Verhoeven, se completa el círculo que en la primera novela había quedado sin rematar. No quiero entrar en detalles sobre qué pasó en "Irene", qué cabos sueltos quedaron por allá, porque no quiero destripar las historias -magníficas e impresionantes todas ellas- protagonizadas por este enorme policía francés que no llega al metro y medio. Sólo diré que el asunto Irene, que fue la mujer de Camille, queda totalmente solucionado ahora; que muchos de los personajes de la primera de la serie reaparecen, personajes a los que habíamos perdido la pista porque en las otras dos novelas de la serie apenas si son nombrados de pasada. En definitiva, es ahora cuando se completa la historia, se cierra la circunferencia y eso a los lectores siempre nos satisface pues nos colma todas las expectativas y suposiciones que durante la lectura se habían ido suscitando en nuestra cabeza.
Las anteriores tres novelas de la tetralogía ya las he reseñado en el blog ("Irene", el 26 de agosto de este año; "Alex", medio mes despúes, el 11 de septiembre; y "Rosy & John", el mes siguiente, el día 4 de octubre). Como se puede ver por las fechas, Pierre Lemaitre y sus personajes han realizado sobre mí una especie de abducción, de secuestro gozoso al que no me he podido sustraer. La prueba es que hoy, mes y medio después y esto porque la novela no ha estado disponible en mi biblioteca pública hasta mediados de noviembre, doy fin a esta serie sobre Verhoeven que me ha entusiasmado de principio a fin.
¿Qué decir, pues, aquí que no haya ya señalado en las otras tres reseñas? Pues poca cosa salvo insistir en que Lemaitre no es autor acomodaticio que diseña un esquema, unos recursos narrativos y/o estilísticos y al ver que el mecanismo funciona lo repite 'ad infinitum'. No, lo que él hace es ir añadiendo a lo que ya le funcionó en otras novelas (ritmo y suspense sostenidos, culturalismo, humor, metaliteratura...) facetas nuevas de aquello o claras innovaciones. Señalaré las que me parecen más llamativas:
🔼La novela tiene un comienzo fulgurante ('in media res') que nos sumerge de inmediato en la historia.
🔼El culturalismo en esta ocasión está más vertido hacia el lado pictórico dada la afición y genética pintora de Camille y habida cuenta de que él es el epicentro de la novela:
Así mismo Lemaitre, que es guionista de no pocas series televisivas, no las deja de lado. En este sentido yo he creído ver un guiño hacia "Breaking Bad" -serie que estoy viendo en estos precisos momentos- en ese camión en cuyo interior se despacha todo tipo de armas cuidadosamente ordenadas."De pronto ella aparece por la esquina de la rue Bleue. Se detiene, con los pies perfectamente alineados a cuarenta centímetros del paso de peatones y un abrigo azul marino. Una cara extrañamente parecida a 'Retrato de familia,' de Holbein pero sin estrabismo" (pág. 180)
Foto (revista Fiat Lux)
🔼Humor magnífico, crítico y finísimo, algo que es inherente a este escritor. Se ve, por ejemplo, cuando Verhoeven corrige a la joven comisaria Merchand la ubicación exacta de Sarajevo que ella situaba en Serbia cuando en realidad está en Bosnia; o cuando, tras un rifirrafe amoroso habido con su actual pareja, reflexiona sobre un comportamiento femenino:
"Ella está de pie frente a la ventana, desnuda, pensativa, los brazos cruzados. Dice: "Se acabó, Camille", sin volverse siquiera hacia él. Después se viste sin decir palabra. En las novelas, con un minuto basta. En la realidad, una mujer desnuda tarda un tiempo enorme en volver a vestirse." (pág. 72)
🔼Novela haciéndose. El escritor, a través del pensamiento de uno de sus personajes, reflexiona
sobre posibles actitudes a tomar por otro/s coprotagonista/s:"Ahí podría terminar la historia. El relato de una circunstancia desafortunada. Pero el más alto de los dos no lo considera así. Está claro que es el que manda y comprende de inmediato cómo están las cosas.¿Qué va a pasar con esta chica?¿Se despertará y empezará a gritar?¿O irrumpirá en la galería Mornier? Peor aún: ¿puede huir, sin que se den cuenta, por la salida de emergencia y buscar ayuda?¿Se esconderá en uno de los retretes, cogerá el móvil y llamará a la policía?" (pág. 13)🔼Giros en la trama más sorprendentes que en otras novelas de la serie con lo que el interés y suspense que me ha suscitado ha sido aún mayor.
🔼Recursos narrativos novedosos. Lemaitre gusta de jugar con el lector y lo hace con una maestría que proporciona un gran placer al lector. En un momento dado adelanta el resultado de una acción para después de exponerla con pelos y señales rompernos la cintura con el quiebro que nos da:
"Esa es una posibilidad. Pero Camille sabe desde hace tiempo que las cosas no sucederán de ese modo."¡Wow, entonces...! Maestro del suspense sin duda, porque a renglón seguido nos suelta la siguiente reflexión filosófica:
"Pensaba que se había dejado llevar por las circunstancias pero no es cierto.
Lo que nos ocurre es lo que nos construimos nosotros mismos."
Consideración final
En la reseña sobre "Álex" señalé el afecto que este autor francés siente por la literatura española.Ya en sus anteriores novelas me lo había parecido, pero al no haber leído más que un título del autor español al que voy a referirme no me atreví a declararlo en el post. Pero de nuevo en "Camille" esta semejanza, dado el tratamiento análogo de las historias, ha vuelto a resonar en mi cabeza. Y ahora sí creo estar en disposición de decir el nombre del escritor que yo considero el Lemaitre español. Me refiero a César Pérez Gellida del que sólo he leído -y reseñado- "Sarna con gusto" y "Cuchillo de palo".
En mi opinión ambos autores mantienen en sus novelas un ritmo y un suspense álgidos; los dos presentan historias muy duras con algunas escenas espeluznantes por la crueldad y el dolor físico que unos personajes infringen a otros; manejan sabiamente el humor para dar descansos adecuados al lector; y sus narraciones son como muy visuales, muy susceptibles de ser llevadas a la `pantalla. De hecho, "Álex" de Lemaitre ya conoce versión cinematográfica y de la primera trilogía de Pérez Gellida, "Versos, canciones y trocitos de carne" se va a realizar una serie televisiva próximamente. Por último cada uno de ellos ha sabido construir un estilo propio que cala en el lector el cual -hablo por mí y por amigos que así me lo declaran- se convierte en un adicto del escritor en cuestión. Yo comencé antes con Pierre Lemaitre que con Pérez Gellida pero la dependencia hacia ambos es semejante. Lo confieso.
¿Compartís conmigo esta semejanza entre ambos autores?
Pues eres de los primeros que leo que le has gustado Camille, en general se dice que baja el listón respecto a los dos primeros. Genial esa comparación entre dos autores de novela negra negrísima.
ResponderEliminarUn beso ;)
Quizás yo como sentí que Lemaitre había bajado en "Alex" y "Rosy & John" me haya venido arriba con "Camille". Pero es mi humilde y sincera opinión.
EliminarLa relación entre Gellida y Lemaitre sé que es arriesgada y que muchos la negarán y otros, quizá, la corroborarán. No sé, me lo ha parecido. Imagino que si Gellida la lee le gustará o, al menos, le gustaría que así fuera. Un tema para debatir.
Un beso, Natàlia
Hola Juan Carlos.
ResponderEliminarMe ha costado contener el impulso de ir a comprar la novela tras leer la reseña porque estoy deseando leer esos giros aún más sorprendentes que en las anteriores, y sobre todo ver cómo es capaz de superarse Pierre Lemaitre. Me guardo este comodín para más adelante.
No he leído a Pérez Gellida pero seguro que seguiré este filón .
Estupenda reseña.
Un abrazo
A mí, como le digo a Natàlia, me ha sorprendido positivamente esta última novela sobre Verhoeven de Lemaitre. Cuando la leas, ya me dirás.
EliminarGellida te lo recomiendo vivamente.
Muchas gracias por tus palabras, Juan Carlos
Pues Juan Carlos cada vez que te leo con esta serie digo que me tengo que poner y aún sigo sin empezarla. Ya sabes lo que pasa, que los libros te caen encima y como estos no los tengo, voy sacando del pendiente y no llego nunca. A la mayoría de la gente los dos últimos no le han gustado tanto. Me alegra que tú vayas en otra línea, es un rayo de esperanza.
ResponderEliminarBesos
Hola Mª Angeles:
EliminarPuede ser que la gente haya leído las novelas de esta serie tal y como fueron publicándose en España: primero "Alex", que en realidad es la segunda de la serie; luego "Irene", sin lugar a dudas la mejor; después "Rosy & John", la más flojita; y para acabar "Camille", mucho mejor que la anterior pero algo inferior o como mucho al nivel de "Irene".
Es interesante que haya discrepancia en este terreno de los gustos o disgustos literarios. A mí me agrada pues te on¡bliga a buscar razonamientos para defender tu postura (ja, ja...)
Un beso
¡Hola! Me ha gustado tu blog y ya tienes una nueva seguidora ;) Me quedo por aquí y espero que puedas pasarte por mi blog y quedarte.
ResponderEliminarNos leemos. Kisses ^^
Anda,esta mañana te comenté y como siempre contestas he entrado y mi comentario no está.Cosas de Blogguer.
ResponderEliminarBueno,pues a mí no me gustó.Yo soy de las que leyó Alex hace años cuando lo publicaron y este verano leí Irene y Camille y ya te digo,me quedo con Irene sin duda.
Un beso
Ay, va, es verdad que no está tu comentario. Y yo lo vi esta mañana. Sólo encuentro una explicación y es que la nueva interfaz de blogger haya hecho alguna cosa no controlada.
EliminarBueno, ya estás aquí otra vez. Precisamente tu comentario, creo que corrobora lo que le he dicho a Mª Angeles Bk, que como en España apareció (bueno iba decir lo mismo que he escrito antes). Y sí, en esto te doy toda la razón, la mejor "Irene", sin duda.
Besos
De Lemaitre sólo he leído "Vestido de novia", que me gustó y sorprendió muchísimo al principio pero luego, aunque me siguió gustando, mis primeras sensaciones se fueron difuminando. De los libros de esta tetralogía no hago más que leer marvillas, así que supongo que debería animarme con ellos, pero con tanto pendiente...
ResponderEliminarA Pérez Gellida no lo he leido aunque sé que goza también de opiniones más que positivas por parte de sus lectores. Como me fío de ti, supongo que la comparación entre ambos será acertada.
Besos
Pues a mí es una de las pocas que me faltan. La primera que leí fue "Nos vemos allá arriba" sobre la I Guerra Mundial, y a partir de ella, debido a las reseñas que fui leyendo, me animé con la serie Verhoeven que está bastante bien. Yo que tú me leería "Irene", es la mejor.
EliminarY Gellida es un vallisoletano que me ha sorprendido por su manera de hacer novela negra. Bueno cuando leas algo de él, ya me dirás.
Besos
Deberiamos formar el grupo de los que amamos a Lemaitre. Es sensacional. Aunque yo hubiera preferido, como digo en mi reseña, otro final parta este Camille. Otro final que tampoco allí desvelo porque decir el final que yo hubiera preferido ya hace sospechar que el final es otro.
ResponderEliminarDe Gellida he leído la primera trilogía y aunque me ha gustado bastante, creo que está muy lejos de Lemaitre, sobre todo en belleza formal. Me encantan las frases de Lemaitre aunque eso creo que se ve más en sus novelas no policíacas.
nada que decir de tu reseña que no haya dicho mil veces: magnífica.
Un beso.
Pues sí, Rosa, tú y yo formamos un buen tandem de amantes de Lemaitre. Lo que con esta última novela he visto es que en el fondo "Camille" forma con "Irene" una unidad clara, siendo las otras dos aventuras del Comandante Verhoeven solamente.
EliminarEn la analogía con Gellida también coincido contigo en que el francés es muy superior al vallisoletano, pero no me dirás que no hay cierta coincidencia en la crudeza de las situaciones y en el manejo de la tensión narrativa. Aunque, desde luego, la belleza del lenguaje en Lemaitre no tiene correspondencia alguna en Gellida.
Un beso
¡Ay Juan Carlos! Con esta serie de reseñas que has hecho del autor junto con las que ha hecho Rosa, no me va a quedar otra que leer a Lemaitre.
ResponderEliminar¡No sé porqué me meto en estos berenjenales!
Encantado de leerte.
Un abrazo.
Ja, Ja..., Francisco. Tú no te preocupes por ello. Creo que Lemaitre te gustará, pero de todos modos a mí ahora mismo me encanta -y cada día más-leer tus relatos. Por eso si andas falto de tiempo, tú no dejes de escribir.
EliminarUn fuerte abrazo
Está preparada y entre Rosa y ahora tú sé sin ninguna duda que me tengo que poner, pero eso de que sean cuatro los libros me frena y acaban pasando otros por delante.
ResponderEliminarExcelente Juan Carlos tu reseña, de verdad es de las que se aprende con todos los detalles en los que haces que nos fijemos, muy buena.
Un saludo y feliz finde
Una reseña del diez! La serie Verhoeven es una de mis favoritas y con Camille he disfrutado al ser un personaje tan peculiar en todos los aspectos. Apuntaré al club de fans de este autor si lo creáis, jeje. Por cierto, yo no me atrevería a confirmarte ese símil entre Lemaitre y César Pérez. Besos
ResponderEliminarEstás admitida al club Amigos de Lemaitre, aun antes de haber sido creado (ja, Ja). En cuanto a la similitud Lemaitre - Gellida ya sé yo que es apuesta arriesgada y difícil de confirmar. Conste que yo tampoco las tengo todas conmigo.
EliminarUn beso, amiga cordobesa
No he leído esta tetralogía. A priori, los temas tratados no me atraen, que sean cuatro libros aún menos pero tu entusiasmo es contagioso.
ResponderEliminarLo peor es que ni siquiera he leído nada de Lemaitre.
Entre tú y Rosa me vais a obligar a poner remedio a esto, aunque no será con estos cuatro libros. Cualquier día os sorprendo.
Un beso, Juan Carlos.
Sí, lo de Rosa y yo mismo sobre Lemaitre es de hacérnoslo mirar. Deberíamos crear el CAL (Club de Admiradores de Lemaitre), Ja, Ja... Bueno, nos gusta y me atrevo a recomendarte un título para iniciarte en este autor: "Nos vemos allá arriba". Te lo recomiendo porque no tiene nada que ver con esta tetralogía y los temas que plantea son muy diferentes.
EliminarUn beso, Paloma