Pages - Menu

28 nov 2017

"Yo confieso" de Jaume Cabré

Todo, todo, en nuestro país lleva invadido por el asunto catalán excesivo tiempo. Sufrimos el bombardeo continuo de noticias sobre votaciones hechas por políticos 'a la violeta', declaraciones de independencia "sí - no - o en fin ya se verá", artículos constitucionales de intervención de la autonomía, convocatoria de elecciones autonómicas, confección de listas electorales... y hasta nos martirizan con un sinfín de declaraciones absurdas ya hoy pero, por si acaso, negadas al instante siguiente de modo igualmente absurdo. Tan abusivo es todo este asunto que ni siquiera este blog y quien lo hace y administra hemos podido escapar de la vorágine.
En el maremágnum de nombres, números económicos, querellas judiciales, denuncias ciudadanas, policías, actuaciones de instituciones de todo tipo..., yo, que no soy muy proclive a perder el tiempo con el juego que se traen entre manos unos y otros no he podido sustraerme a un nombre que he oído va en una de las listas electorales.
Se trata del novelista Jaume Cabré que acompaña al ex-president Carles Puigdemont en la candidatura de JuntsxCat, el partido que este último ha montado desde su voluntariamente elegida residencia bruselense.

Jaume Cabré, Profesores e Instituto que escriben, JuntsxCat
De Jaume Cabré leí con mucho gusto hará cosa de unos cinco años su novela "Yo confieso" publicada, como toda su obra, primero en catalán ("Jo confesso"), el año 2011 por la editorial Proa e inmediatamente vertida al castellano por Destino. En 2012 la Asociación Española de Críticos Literarios la distinguió con el Premio de la Crítica, galardón que no era la primera vez que Cabré recibía pues ya lo había obtenido en 1985 con "Fra Junoy o l’agonia dels sons" ("Fray Junoy o la agonía de los sonidos"), en 1992 con "Senyoria" y en 2005 con "Les veus del Pamano" ("Las voces del Pamano ").

Fue tal el éxito de su novela que en la tertulia de amigos y antiguos compañeros de Instituto de la que formo parte, "Más que palabras...",  la pusimos como lectura del mes de enero de 2012. La novela es magnífica y dio estupendo juego como queda reflejado en el blog donde al finalizar cada reunión se hace la Crónica de la velada

Por ello, pues, aprovechando que el Pisuerga pasa por Valladolid, como dice el refrán castellano, dedico este post a esta magnífica obra del novelista barcelonés nacido en 1947, licenciado en Filología catalana, profesor de Instituto muchos años hasta que pasó a serlo de la universidad de Lérida, y actualmente miembro de la Academia de la lengua catalana.

La Reseña 
La voluminosa novela de1000 páginas del autor catalán Jaume Cabré habla del Mal. Fija la atención en el discurrir de la vida de una familia  –los Ardèvol- en función de las vicisitudes acaecidas a dos objetos: el Vial, un violín storioni, y el cuadro de Modest Urgell, Santa María de Guerri.  El primero le sirve para presentar ese libro que a lo largo del relato Adriá Ardevol se está proponiendo escribir, 'El problema del mal': la historia de Jachiam de Mureda de Pardàc, catador de maderas que, tras huir de su localidad por haber encontrado al autor del incendio del bosque que surtía a la familia de maderas aptas para su transformación -Bulchanij Brocia de Moena-, huirá y descubrirá un bosque de maderas óptimas para hacer violines. Con éstas llegará a Cremona y allí las venderá a Lorenzo Storioni que fabricará el violín que venderá, apremiado por la necesidad (su amada María quiere huir con él), a Monsieur la Guite que a su vez lo hará llegar a Jean Marie Leclair; y de éste llegará a manos de la familia judía de Mattias Alpaerts a cuya mujer Berta le sería arrebatado de sus manos por el nazi alemán Dr Voigt y a éste, acuciado por el momento y la necesidad, se lo ‘compraría’ Félix Ardèvol, padre de Adriá.

Hay en la historia del Vial una clara relación con el mal. Y curiosamente ese mal siempre en pro de la belleza, en este caso de la música. La música invade todo el relato: la técnica del contrapunto es habitual -más de una historia, frecuentemente tres o más, se presentan a un tiempo- llegando la mezcla a crear confusión. Cada una de las 7 partes en que se divide el relato está puesta bajo una  advocación musical.
posverdad, catalanistas, escritores catalanes
Incluso es 'musical' el juego constante de pasar de unos tiempos y personas  verbales a otros; al igual que la alternancia en las personas narrativas o la fluidez, ligereza y versatilidad con que utiliza los diversos tipos de estilo: directo, indirecto, indirecto libre y la fusión de todos ellos. Todo este juego estilístico debe mucho, sin duda, al buen hacer del autor como guionista de seriales televisivos para TV3, y sirve al lector de la novela para disfrutar con el mero acto de leer.
La historia avanza muy unida, aunque en desorden. No sabemos el porqué de este desorden hasta los últimos capítulos, en los que la importancia de Bernat, el amigo de Adrià, sube enteros y se convierte en el relator. Adrià ha perdido la cabeza, tiene alzheimer. Esto justifica sus “ausencias” desde bien temprano, pero también el desvarío con el que corre, en ocasiones, el relato; y también las identificaciones realizadas entre personajes de muy distintas épocas que se confunden en su cabeza al tener alguna característica común. A este respecto es muy importante la identificación que en la parte IV –Palimpsestus- realiza entre Inquisición y Nazismo, llegando a nombrar con el mismo patronímico, Nicolau Eimeric, al inquisidor catalán de Girona (nacido en 1367) que al encargado de Austwitz nacido en Baden-Baden en 1900 con el nombre de Rudolf Höss. Igualmente sucede con los enfrentamientos entre este inquisidor gerundés y su secretario Miquel de Susqueda (fray Miquel), que son parangonables –y de hecho así se señalan- con los del Comandante del campo de Auswitz, Rudolf Höss, y el médico del campo, Aribert Voigt. Del mismo modo son patentes los paralelismos entre la historia del cierre del Monasterio de Burgal (ss. XIV) y la del maderero Jachiam de Mureda de Pardàc (s. XVII-XVIII); así en ambas aparece un personaje deforme: el gordo de Moena en la del XVIII y el bizco de Salt en la del siglo XIV-XV.
En otras ocasiones el paralelismo lo es por contraste. Así mientras en el XV, el médico judío de Girona, Josep Xarom, debe abandonar su ciudad y comodidad para huir de la Inquisición, cinco siglos más tarde será otro médico, Aribert Voigt, quien perseguirá a los judíos y quien se cebará con la familia de otro médico judío.

Lo mejor
Es una obra con un fortísimo componente cultural. Al respecto son muy interesantes los numerosos intertextos (referencias a [o de] otros relatos) que pululan por la novela: Goethe, Ungaretti, "El coronel no tiene quien le escriba" de García Márquez, "En busca del tiempo perdido" de Marcel Proust, etc.

Lo peor
El autor ha creado un auténtico producto mercantil -muy bien escrito, eso sí- en el que ha metido todo cual si de un cajón de sastre se tratase: música, pintura, nazis, judíos perseguidos, referencias literarias, estraperlistas de la posguerra española y mundial, solitarios niños superdotados, músicos insatisfechos y aprovechados, el alzhéimer, casualidades increíbles...
Pero lo que menos me ha agradado es que en el interesantísimo aporte culturalista que subyace en tan extenso relato el autor incurra en alguna que otra incorrección o falsificación histórica cual es su insistencia en hablar de la Corona catalana o/y del Reino de Cataluña. Diríase que Jaume Cabré ya en 2011 estaba al tanto de la posverdad; quizás, dejando a un lado su innegable calidad literaria, estas insistentes 'desviaciones' de la verdad histórica sean los méritos que el ex-honorable haya tenido en cuenta al considerar su inclusión en tan peculiar candidatura política.







26 comentarios:

  1. Hace tiempo que la tengo entre mis libros pendientes. Y no me suelo dejar llevar por cómo me caiga un escritor ni por lo que haga o deje de hacer, sino por su obra, pero no me veo con ganas de semejante obra, quizá porque llevo una temporada bastante cansada de libros enormes a los que les sobran páginas y páginas...

    Besos.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Yo también suele intentar abstraerme de la peripecia en la vida real de los autores, pero es evidente que ambas actividades, la producida literariamente y la vivida en el aquí y ahora se retroalimentan mutuamente. En el caso de Cabré es evidente que su eminente posición como autor de novelas importantes lo ha aupado a una lista electoral de un determinado signo.
      Pero lo fundamental, como bien dices, es su Obra, y esta novela es muy buena y muy recomendable, Ro. Léela en cuanto puedas, no te arrepentirás.
      Un beso

      Eliminar
  2. De lo mejor que es leído. Es la novela que habla de cómo hacer una novela en medio de una impregnada de primera persona y música. Una preciosa obra.

    Un saludo

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Efectivamente, Albada Dos, esa novela que tan bien describes es la que la actualidad política me ha hecho recordar. Una novela de una calidad impresionante.
      Un beso

      Eliminar
  3. Yo lo leí en su momento y la conclusión que saqué, aparte de que está bien escrito y es entretenido, es que no dejaba de ser, como dices, un producto mercantil demasiado leno de temas oportunistas de los que se usan para atrapar lectores (nazis, judíos, historia...), pero sin llegar a concretar.
    No sé concretar, porque tampoco recuerdo más que sensaciones. Hace mucho que lo leí y de la trama casi no me acuerdo, pero sí de esa sensación de "mucho ruido y pocas nueces".
    Un beso.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Yo lo recuerdo algo más por eso de que fue objeto de una tertulia literaria. Lo que me ha hecho recordar esta buena novela es el oportunismo de los políticos que echan mano de todo lo que puede llevar agua a su molino. También es cierto que el aguador se deja hacer. En fin, cosas veredes...
      Un beso

      Eliminar
  4. Había visto tantas excelencias sobre este libro que me daba hasta algo de miedo y aún no me decidía a leerlo.Ahora, después de leerte, miedo no me da lo que me preocupa es que me defraude.
    Besos

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola, Inés:
      Defraudar no creo que te defraude porque la historia está bien hilada y discurre con soltura y agilidad. Lo que digo de alguna verdad incierta no tendría importancia salvo que se utilice en el mundo real cual es el caso en estos momentos al ir el novelista en una candidatura electoral que construye un imaginario no muy respetuoso con la Verdad.
      Un beso

      Eliminar
  5. Es uno de esos libros que compré con fervor movida por las críticas y que al final quedó olvidada en la estantería porque la lista para reseñar no acaba nunca...
    Un día será al fin 🙀

    Besos 💋💋💋

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Ja, ja..., mira que hay libros que adquirimos con ilusión y que luego quedan postergados en alguna estantería perdida. Pero, como bien dices, algún día le llegará su momento, ¡claro que sí!
      Besos

      Eliminar
  6. Leí esta novela hace años y recuerdo que estuve tentada de abandonarla varias veces, fue tal el cacao que me hice con ese desorden al que haces alusión. Al final todo tiene su explicación y "perdoné" ese caos. Por cierto, te voy a hacer una crítica desde el cariño: que desveles lo que le pasa a Adriá y de dónde viene ese desorden al contar las cosas creo que es spoiler. Aunque supongo que a estas alturas ya habrá muchos sitios donde se cuenta eso.
    Con motivo o sin él, ese caos en la lectura me hizo sentirme muy incómoda. Quedé en la idea de no repetir autor, después de lo que pones sobre sus desviaciones históricas... lo borro definitivamente.
    Un besote, Juan Carlos.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Acepto tu riña, Paloma. Que conste que ayer mientras la redactaba estuve dudando un montón si decirlo o no. Al final opté por hacerlo porque -pensé- mucha gente no va a leerla y otra, ahora hablo por mí, cuando leo una reseña me quedo vagamente con los detalles concretos pues lo que me interesa es la idea global de la obra. Pensé también en ocultar esa información dejando a la voluntad del lector descubrirla o no (ya lo he hecho otras veces) simplemente seleccionando con el cursor lo oculto, pero como tengo que no se pueda copiar texto de las entradas pues resulta que no pude hacerlo. Tengo que estudiar cómo solucionar este inconveniente.
      Pero dejando de lado todo lo dicho, sí, amiga mía, no tengo más remedio que pedir disculpas.
      Un beso

      Eliminar
  7. Me gusta el aporte cultural y los instrumentos para ver hablar sobre el mal pero creo que si politiza mucho el libro no terminaría de disfrutarlo como no he disfrutado otros que prefiero olvidar por ese motivo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. No está politizada la historia para nada. Es el lector (en este caso yo) quien a cuenta del posicionamiento político del escritor va, cual Sherlock Holmes, husmeando por las páginas buscando detalles que puedan explicar esta deriva del novelista hacia la política activa y pública.
      Pero es una novela muy buena, eso sin duda, amigo mío.
      Un abrazo

      Eliminar
  8. Es este un libro que tengo apartado esperando lo descubra en una de las estanterías de casa, pero siempre encuentro una excusa para ir aplazándolo, y es que son casi 1000 páginas. Por lo que cuentas en tu reseña y los comentarios creo que requiere mucha atención por ello elegiré bien el momento para leerla, me pasaré y te comentaré sin duda.

    Abrazos.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Es cierto, amiga mía,que el momento elegido para leer una determinada novela influye decisivamente en su disfrute y comprensión.
      Pero cuando decidas ponerte con ella te aseguro que disfrutarás.
      Un abrazo

      Eliminar
  9. hola! lo leimos y lo que le rescato es lo del tema de la musica y el violin, lo demas coincido contigo y en tu opinion aunque no supiera ponerlo bien en palabras, igualmente la he disfrutado, gracias por tu enseñanza y reseña invalorable! saludosbuhos

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Gracias a vosotras por vuestra opinión y la atención que dispensáis a mi blog
      Besos

      Eliminar
  10. Lo leí en catalán hace ya unos años y me encantó. Para mí es una obra maestra. El poscionamiento político del escritor me es indiferente y creo que no tiene que utilizarse en la valoración de sus obras.
    Un beso ;)

    ResponderEliminar
  11. Hola, Natàlia:
    La historia de la literatura nos habla de los autores y sus experiencias vitales son muy importantes a la hora de valorar en su justa medida las obras que hayan salido de sus manos . ¿Es indiferente que Dante militase en el bando de los güelfos o en el de los gibelinos? ¿Lo es, acaso, que Antoine de Sant d'Exupery fuese aviador en la segunda guerra mundial? Naturalmente que no. ¿Mejora o empeora estás actividades o posicionamientos la calidad literaria de sus creaciones? En nada, naturalmente. Pero es innegable que entendemos más al hombre escritor y a través de él sus personajes se nos muestran con más claridad.
    Natàlia, para mí "Yo confieso" es una obra excelente, magnífica; pero eso no impide -no olvides que la reseña me la ha suscitado ese hecho- que la vida pública del autor se cuele en mi comentario especialmente si detecto alguna falsedad o intencionada desviación histórica (posverdad,la llaman ahora) que la organización política que, parece, lo acoge ahora en sus filas usa y abusa con plena intenciones espurias.
    Un beso

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Juan Carlos desde el cariño y respeto disiento en que sean falsedades (o posverdad). Pero eso nos daría para un debate muy largo ;)
      Un besito

      Eliminar
    2. Ja, ja, ja..., Natàlia, vaya si daría para debatir. Pero la verdad -que decía Machado en "Juan de Mairena"- es siempre la verdad dígala Agamenón o su porquero.
      Besos

      Eliminar
  12. Hola a todos.
    Leí con mucho interés "Yo Confieso" hace algunos meses pero me quedó un detalle que no supe explicar. Lo siguiente NO ES un destripe. El número que Elisaveta lleva tatuado en su brazo es el mismo que usa Fèlix Ardèvol para abrir su caja fuerte. No puede ser casual, es un número de seis cifras. Pero es un "cordón suelto" que no consigo atar con nada. Gracias.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Leí la novela hará cosa de tres o cuatro años como poco, mi memoria es quebradiza y cada año que pasa se quiebra un poquito más aún. No puedo atarte ese "cordón suelto", como tú lo llamas, Izatasun. Lo siento.
      Un abrazo

      Eliminar
  13. Compré la novela hace unos años y la empecé con muchas ganas. La dejé porque tras las primeras 150 pg me pareció incomible. Ha estado en mi librería cinco años hasta que hace unos meses la he retomado. Cada libro tiene su momento y desde luego que es un gran relato, bien escrito y con muchas tramas y lineas temporales que se solapan. Por ello resulta muy confuso y me pierdo en el relato. Me cuesta recordar quien es quien y que relación hay entre unos y otros. Creo que algunas tramas y líneas no están conectadas. Me faltan unas 200 páginas para terminar y la verdad que lo estoy deseando para leer otras cosas menos originales por decirlo de algún modo. El autor domina el uso de la lengua pero el estilo que utiliza no me gusta. La narración se pierde, se solapan conversaciones y personajes, líneas temporales..no usa signos ortográficos que ayuden a no perderse. No me parece ninguna obra maestra aunque sea un buen libro. Le doy un 6'5.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola, Merche:
      Un 6'5 en mi opinión es una buena nota (ja, ja...). Estoy contigo en que los libros tienen su momento y que un buen relato no nos lo parece un día por lo que sea y otro nos agrada bastante. Marcos Ordóñez recrea su juventud que a ti -no sé tu edad, pero me voy a arriesgar- seguramente te queda lejos por ser mucho más joven que él (¿acerté?). A mí, sin embargo, me queda muy próxima esa época que relata y me identifico algo con ciertas cosas que le suceden al protagonista. También te diré que Marcos Ordóñez en mi opinión es más un buen crítico que un buen novelista, pese a no ser malo en esto. pero sí, estoy contigo, a veces su relato se pierde en idas y venidas de cierto sinsentido.
      PD.- Ja, ja... Acabo de pinchar en tu perfil y veo que gustas de la música de los 50, 60, 70 y 80. ¡Uy, madre, me da que mi apuesta sobre tu edad es equivocada! Bueno, no lo corrijo.
      Saludos

      Eliminar

Muchas Gracias por dejar tu Comentario.