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20 jul 2022

La edad de oro. Principal novela de Wang Xiaobo

«Chen Qingyang me confesó que cada vez que hacíamos el amor era una tortura para ella. Deseaba gritar, abrazarme y besarme desenfrenadamente, pero se negaba a dejarse arrastrar por aquel sentimiento. Había decidido que nunca amaría a nadie.»

La mujer en China, Sexo en China, China hoy
Escapo de los calores -me escondo, más bien-  recluido en casa con lecturas variadas a mi alcance. Una de ellas ha sido ésta que recomendaba a principios de año mi amigo Francisco en su blog "Un lector indiscreto". Así que desde aquí agradezco a Francisco su recomendación.

He disfrutado mucho leyendo las confesiones que el protagonista de la novela debe de hacer a sus reeducadores culturales durante el tiempo que pasó en una brigada de trabajo en una provincia fronteriza china. Sucedió en la llamada Revolución Cultural que asoló China durante los diez últimos años que estuvo bajo la implacable férula del caudillo Mao Zedong. Son confesiones referidas a las actividades sexuales desarrolladas por él, Wang Er , con Chen Quingyang, médico de la Granja de Reeducación en la que como tantos otros universitarios ambos habían sido confinados dentro de las campañas de reeducación establecidas en el país a lo largo de los años 1966 a 1976. 

Si nos atenemos a lo que el narrador protagonista cuenta, tanto él como la médico con la que intimó coincidieron un tiempo en la Granja de trabajo a la que fueron conducidos a fin de convertirlos en "juventud educada" en los valores marxistas; valores que en opinión de los dirigentes del momento los jóvenes chinos estaban perdiendo. El propio autor, Wang Xiaobo, sufrió en carne propia esta política durante los años 1968 a 1970 siendo enviado a Yunnan Farm, el mismo centro donde suceden los hechos de la historia que se relata. Tenía en ese momento Xiaobo 16 años  y estaba a punto de ingresar en  la Universidad. Es precisamente la experiencia vivida durante estos dos años de estancia en el centro de reeducación la que le sirve de inspiración para "La edad de oro". Pero, insiste el autor, la historia que cuenta en La edad de oro no es la de su experiencia autobiográfica.

El reencuentro casual del narrador con Chen Quingyang «en la feria de Año Nuevo del parque Longtanhu de Pekín», veinte años después de los meses durante los que estuvieron relacionados, es el detonante para que Wang Er, relate en primera persona la experiencia vivida. Wang Er sufría de fuertes dolores lumbares debido a que había sido enviado por su jefe de brigada a plantar arroz, actividad que le exigía estar constantemente con el espinazo doblado en una posición muy forzada para su estatura de 1'90 metros. Por este motivo visitó a la médico de la Brigada 15, o sea a Chen Quingyang. Más tarde ella lo visitaría a él en su brigada, la número 14. Lo que comenzó siendo sólo una relación profesional y de mera amistad derivó casi sin darse ellos cuenta en una relación sexual. Aunque hubo momentos en que los dos jóvenes escapaban de la Granja llegando a pasar varios meses fuera de ella, siempre decidían regresar para evitar represalias mayores que les imposibilitaran salir de la misma y retomar su vida de estudiantes.

Para lograr salir de estas Brigadas de trabajo, dice en un momento de la novela el narrador, «el Grupo de Seguridad Popular nos obligó a seguir escribiendo la confesión. Tuvimos mala suerte, pues justo en aquel momento se había iniciado en todo el país un nuevo movimiento político y alguien había decidido denunciarnos.» Se les acusará de haber salido del país y ser espías extranjeros. Como tal cosa se demostró enseguida ser falsa, los del Grupo de Seguridad les exigen que escriban una autoconfesión acusándose de algo, por ejemplo de haber mantenido relaciones sexuales, lo que por contra sí era verdad pese a que ellos en principio lo negasen.

El sexo en La edad de oro, dice en el epilogo a la misma Miguel Sala Montero, traductor de la novela «juega un papel protagonista. En palabras del autor: "No lo hice (incluir escenas de sexo) por polemizar o resultar intencionadamente vulgar, sino como una forma de recuperar la memoria de aquellos años. Todos saben que las décadas de los sesenta y los setenta en China fueron una época 'asexual'"». 

Es, pues, la mostración desinhibida del sexo una manera de criticar políticamente el sistema que durante cerca de 30 años dirigió China con puño de hierro. A la muerte de Mao Zedong en 1976 el país comenzaría un proceso de apertura socioeconómica que lo llevaría con el paso de los años a convertirse en una potencia mundial. Al tiempo que los ciudadanos prosperaban económicamente el Estado abrió algo la mano en el terreno cultural lo que literariamente hablando dio lugar a una serie de autores como Mo Yan [en este blog he reseñado sus novelas La vida y la muerte me están desgastando y Las baladas del ajo], Xinran Xue [en el blog reseñé hace poco Nacer mujer en China (Las voces silenciadas)] o Wang Xiaobo, quienes sin hacer mucho hierro cuestionan la política ejecutada y representada por la Banda de los Cuatro y critican muchos de los excesos a los que un equivocado celo ideológico condujo el inmenso país. Sólo he citado autores que he leído pero es evidente que en China fueron -lo son actualmente- muchas las voces que se levantaron contra los abusos del pasado. Pero no hay que engañarse: es mucha la represión y el control cultural que sufren actualmente los intelectuales en China.

Muy importante me ha parecido la libertad con la que la mujer se muestra en esta breve novela. Chen Quingyang al principio aparece muy preocupada por la opinión de golfa que sobre ella se tenía en la Granja:
«Para ser una golfa hay que acostarse con los hombres de otras y yo no me he acostado con nadie desde que mi marido entró en la cárcel hace ya más de un año; y antes tampoco. Por eso, no entiendo por qué todos me llaman golfa.» 
Ella tras mantener durante meses relaciones íntimas con Wang Er jamás sintió que estuviese cometiendo ninguna falta, ningún delito, pues el sexo para ella no tenía nada de malo. Se lo reconocerá al narrador en ese encuentro póstumo en Pekín veinte años después de los hechos acaecidos en la Granja de reeducación: 
«Aquella también fue su edad de oro. Aunque todos decían que era una golfa, Chen Qingyang nunca se sintió realmente culpable. Me reí. Según ella nos unía una gran amistad y lo que hacíamos no podía ser considerado pecado»
Escritores chinos actuales, literatura china postmaoísta

Sí, también para ella aquella fue su edad de oro, igual que lo fue para el narrador como él mismo lo declara en un momento de la novela. Y es que ser un joven de 21 años y poder tener sexo libremente consentido con una mujer joven de 23 es vivir un momento magnífico, quizás el mejor momento de la existencia. Y, claro, también así lo sintió ella aunque quizás por su educación, su condición femenina o lo que fuera reprimiese más su entrega que él . Sin embargo y contra todo pronóstico sería la confesión que ella escribió la que al fin y a la postre sirvió para que el comandante del campo decidiese ponerlos en libertad. ¿Qué confesó Chen Quingyang? ¿Por qué las múltiples confesiones escritas por Wang Er pese a ser escritor no sirvieron para lograr su libertad? Leyendo, leyendo, se alcanza a conocer el motivo; sólo os puedo decir que es un motivo muy hermoso, muy bello. Ya os enteraréis.

Nota:
La edad de oro de Wang Xiaobo es uno de los tres títulos que he elegido para cumplir el Reto Serendipia Recomienda 2022.

16 comentarios:

  1. No conocía ni al autor ni esta novela. Me la apunto para más adelante porque me ha parecido muy interesante pero un poco muy dura y ahora necesito cosas que no me duelan.
    Un regalo leerte, Juan Carlos. Gracias por tus reseñas, son oro.

    Un fuerte abrazo.

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    1. La dureza está en la reclusión forzosa de los dos jóvenes. Pero pese al contexto penoso hay momentos de humor en la novela.
      Gracias a ti, Rita, por tus comentarios.

      Otro abrazo fuerte para ti

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  2. China es una nación tan inmensa y de la que conocemos tan poco que ya de por sí la obra podría considerarse un ensayo romántico. Ánimo Juan Carlos para seguir cumpliendo con los retos literarios y a mantenerse fresco de los calores🥵
    Un fuerte abrazo.

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    1. Cierto, cierto, Miguel. China es un mundo en sí misma. ¿Ensayo romántico? Por la relación amorosa que se presenta podría calificarse de romántico, pero en la categoría de ensayo yo no lo incluiría. El reto de Serendipia recomienda es un reto magnífico porque consiste en elegir tres lecturas de entre las que varios lectores han considerado las mejores del año anterior. Es como ir sobre seguro. A mí por eso me encanta.
      Dado el calor que hace, Miguel, no nos queda otra que tirarnos a la piscina en sentido literal (ja, ja...)
      Un abrazo

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  3. ¡Que novela tan interesante nos traes, Juan Carlos!
    una época de China que da mucho juego literario y ademas el aliciente de saber que, aunque lo contado aquí no es estrictamente la biografía novelada del autor, sí que vivió esa época y en esa Granja de trabajo. La verdad es que resulta bastante espeluznante la historia ¿verdad? la política de esos años...
    Me gustan mucho las lecturas de autores orientales, suelo disfrutarlas mucho, así que me llevo en mente esta novela y el propósito de leer a este autor
    Besos

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    1. Está muy bien escrita y la historia resulta de lo más interesante. Te va a gustar, MArian.
      Un beso

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  4. China es, para mí (desde el punto de vista literario), una gran desconocida. Las pocas veces que he intentado acercarme a alguno de sus autores he tenido que retirarme, incapaz de experimentar admiración por la obra. En este caso, abordas un nombre que desconocía por entero. Quizá debería volver a intentarlo. Esos infames centros de reeducación marxistas me traen siempre a la memoria la película "Las invasiones bárbaras".

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    1. Una pregunta, Rubén: ¿Por qué te los centros de reeducación marxista traen a tu memoria la película de "Las invasiones bárbaras"? Por lo que recuerdo el film va de un hombre mayor con cáncer terminal que reúne a su alrededor a toda su familia, sus ex-amantes, su exmujer, sus amigos... Bueno, tú sabrás por qué.
      Léete alguno de los títulos que señalo en la reseña o este mismo. Quizás logres reconciliarte con la literatura del gigante asiático.
      Un abrazo

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  5. Me interesan estas novelas, así que tomo nota. Gracias. Besos.

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  6. Magnífica reseña. Casi me has tentado y eso que las historias ambientadas en la Revolución Cultural me agobian bastante. He leído "Balzac y la joven costurera china" de Dai Sijie , "La Montaña del Alma” de Gao Xingjian y algunos más que no recuerdo, aparte del de Xinran Xue. Salvo este último que trata muchas más cosas, los otros me han resultado poco gratos de leer. Cosa mía, por supuesto. Son buenas novelas.
    Igual me animo, pero prefiero otra cosa.
    Un beso.

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    1. Sí, a veces las historias chinas situadas en la época de la Revolución Cultural resultan algo agobiantes y pesadas. Esto no quiere decir que no sean buenas, en mi opinión. Pienso por ejemplo en Mo Yan cuyos libros suelen alcanzar las 400 y más frecuentemente las 600 páginas; es ahí, en esa cantidad de papel, donde yo me he llegado a agobiar. Pero esta novelita de Wang Xiaobo es corta y muy amena; muy distinta a otras situadas en esa época. Estoy seguro de que te gustará.
      Un beso

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  7. Leí hace muchos años alguna que otra novela china ambientada en la Revolución Cultura. Me tientas ahora a sumergirme nuevamente en ese contexto, aunque solo sea para enterarme de cuál es el hermoso motivo por el que fue necesaria la confesión de Chen Quingyang para que tanto ella como Wang Er consiguieran la libertad .
    Besos

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    1. Ya sabes, Lorena, que la mejor manera de vencer una tentación es caer en ella. En cuanto leas la novela se te quitará la pesadumbre que cualquier tentación impone (ja, ja...)
      Un beso

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  8. El tema aparece interesante. China en sí misma es interesante por lo lejana, extraña y compleja que es, aunque no sé si esta lectura para el verano es la más indicada, me la apunto de todas formas a pesar de que mi feeling con los autores orientales es inexistente.
    Un beso.

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    1. Después de haberte impregnado de cultura china tradicional esta novela te vendrá muy bien para ver lo mucho que la sociedad y las mujeres han evolucionado en China.
      Besos

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